Por qué el virus Oropouche se está propagando tan rápido?
Los casos de virus Oropouche (OROV) aumentaron significativamente en 2024 y principios de 2025, con casi 20.000 infecciones confirmadas en Latinoamérica y el Caribe, incluidas cuatro muertes. La mayor carga se observó en Brasil, seguido de Perú y Cuba. Este repentino aumento ha captado la atención de las autoridades de salud pública. ¿Qué contribuyó a su resurgimiento y rápida propagación geográfica?
Habiendo seguido de cerca los brotes de arbovirus en los últimos años, este aumento repentino es preocupante, no solo por su escala, sino por su silencio. Al igual que el dengue, Zika y chikungunya, el virus Oropouche se transmite por la picadura de artrópodos infectados y navega por una compleja red de vectores, huéspedes vertebrados y entornos cada vez más permisivos. Lo que hace que el virus sea especialmente insidioso es su transmisión de doble ciclo: uno urbano dominado por mosquitos Culicoides paraensis y uno selvático que involucra mosquitos como Aedes serratus y Culex quinquefasciatus. Identificado por primera vez en Trinidad y Tobago en la década de 1950 y aislado en Brasil en 1960, el virus Oropouche se ha extendido desde entonces por la Amazonia y otras partes de Centroamérica y Sudamérica, con brotes impulsados por cambios ambientales, deforestación, urbanización y movilidad humana.
Desde un punto de vista clínico, la infección por el virus Oropouche se presenta de forma similar a las infecciones por los virus de dengue o chikungunya: fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y erupción cutánea. Sin embargo, alrededor de 40 % de las personas infectadas no presenta ningún síntoma, lo que complica aún más la vigilancia. Si bien la mayoría de los casos sintomáticos se resuelven en dos semanas, las complicaciones neurológicas graves, como meningitis y encefalitis, son poco frecuentes, pero posibles. Esto debería mantener alerta a las autoridades de salud pública.
Una historia en desarrollo
En febrero de 2024, Río de Janeiro confirmó su primer caso de fiebre de Oropouche en un paciente varón que había regresado del estado brasileño de Amazonas, lo que indica la expansión del virus más allá de sus focos tradicionales en Amazonas, Acre y Rondônia. Simultáneamente, Brasil enfrentó una grave epidemia de dengue, que superó el millón de casos en los dos primeros meses de 2024.[5] La superposición de síntomas entre la fiebre de Oropouche y otros arbovirus sugiere un subdiagnóstico significativo de los casos de Oropouche, lo que representa un gran desafío para el sistema de salud.
En julio de 2024, Brasil informó las primeras muertes en el mundo por virus Oropouche, que afectaron a dos mujeres previamente sanas del estado de Bahía, lo que destacó la gravedad de la enfermedad y la urgente necesidad de mejorar la vigilancia y las respuestas de salud pública.
Ver artículo completo: https://shorturl.at/hdGel
Fecha de publicación jueves 5 de junio de 2025
