SOMOS NUESTRA MEMORIA. Lo mejor en 2025 de la psicología en México

Los más de 350 mil psicólogos en el país tenemos diversas situaciones que nos hacen ver lo bueno y lo malo de nuestra profesión y de la vida de las personas que atendemos, porque la realidad social no puede ser algo ajeno a la psicología.

Lo mejor de la Psicología en México (2025)

1. Contribución al Bienestar Social: La psicología desempeña un papel fundamental en la construcción del bienestar social, impactando positivamente en las familias a través de procesos novedosos, como el que pude liderar para diagnosticar escuelas completas en salud mental con excelentes resultados.
2. Cada día somos más visibles para las personas: La pandemia puso la salud mental en primer plano, aumentando la conciencia pública sobre problemas de salud mental.
3. Trabajo más focalizado: Los psicólogos tienen amplias oportunidades de empleo más allá de la clínica tradicional, incluyendo áreas comunitarias, educativas e investigación.
4. Integración Tecnológica: La profesión está adoptando nuevas herramientas tecnológicas para terapias, como el uso de IA en diagnósticos e intervenciones, lo que mejora el alcance de los tratamientos, facilitando nuestro trabajo.
5. Hacemos la psicología accesible para miles de personas: los psicólogos y psiquiatras con los que trabajamos le damos flexibilidad a los pacientes, con opciones de consultorios presenciales, en línea o híbridos.
6. Avances en Investigación: Existen líneas de investigación innovadoras en salud mental comunitaria, neurociencia cognitiva y tratamientos específicos para poblaciones vulnerables, lideradas por la Asociación Mexicana de Psicología y Desarrollo Comunitario con sus prestigiosas Secciones Clínicas, lo que abre caminos para la especialización y el desarrollo profesional.

Lo Peor de la Psicología en México (2025)

• Falta de presupuestos en salud mental: instituciones como la SEP o la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti), por mencionar un par, no han conducido una política pública seria de salud mental en el ámbito de sus atribuciones, y los recursos públicos se desvían y no llegan a constituirse como una solución, sino como otro problema nacional.
• Sigue la ignorancia sobre la salud mental: A pesar de los avances, todavía existe un estigma considerable alrededor de los trastornos mentales graves, lo que puede disuadir a las personas y sus familias de buscar ayuda a tiempo.
• Insuficiencia de servicios públicos de calidad: La salud mental sigue siendo percibida como un lujo para muchos debido a la falta de fondos suficientes y un acceso inequitativo a servicios públicos de calidad, lo que agrava las desigualdades en la atención.
• No hay Ley de Salud Mental: La implementación total de la legislación en salud mental se ha retrasado, con la resistencia del autoritario, caduco y corrupto modelo biomédico en salud mental, en el que siguen funcionando hospitales psiquiátricos y el avance hacia un modelo de atención comunitaria no se nota, lo que indica barreras burocráticas y estructurales.
• Falta capacitación de calidad: La especialización, necesaria para mejorar oportunidades para los psicólogos, a menudo requiere estudios largos y costosos, lo que puede representar una barrera financiera para algunos profesionales.
• Falta el autocuidado de las y los psicólogos: Los profesionales de la psicología a menudo enfrentamos altos niveles de estrés laboral, presión y cargas de trabajo significativas, especialmente en entornos clínicos o de crisis.
• Riesgos Éticos y de Desinformación: La proliferación de charlatanes de la salud mental, terapias digitales con fines lucrativos y el uso de IA sin acompañamiento de psicólogos profesionales también plantean desafíos éticos y la calidad en la atención, como la manipulación psicológica y la desinformación, que requieren directrices claras, inversiones empresariales y una formación rigurosa.

Causas y azares…

• Las pifias que ha tenido la presidenta Claudia Sheinbaum en temas de salud son evidentes y hablan de su desinterés para abordar el tema, que además de complejo se encuentra empantanado en la robadera: las farmacias siguen administradas por empresas privadas y los sistemas de información también, con millones de pesos tirados a la basura, mientras el personal que llaman eventual sigue sin justicia.
• Los gobernadores no están representando lo mejor de sus partidos políticos, y allí hay una gran veta de odio contra todos ellos: faltan en verdad lideres comprometidos con los problemas sociales, no apartasillas de cuarta en todos los clanes.
• Los presidentes municipales no tienen la más mínima idea de cómo implementar un programa de salud mental y siguen soportando la presión de la delincuencia sin políticas municipales preventivas. Cobrar no quiere decir desquitar.

Hasta la próxima 2026, que la vejez (tal es el nombre que los otros le dan) puede ser el tiempo de nuestra dicha.

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Fecha de publicación viernes 26 de diciembre de 2025